jueves, 31 de enero de 2013

1x89 Tengo una cita

Era una mañana agitada. Eran las 8.30. Cuando un


señor mayor de unos 80 años llegó al hospital para


que le sacaran los puntos de su pulgar. El señor dijo


que estaba apurado y que tenía una cita a las 9.00.


Comprobé sus señales vitales y le pedía que tomara


asiento sabiendo que quizás pasaría una hora antes


de que alguien pudiera atenderlo. Lo vi mirando su


reloj y decidí que ya que no estaba ocupado con otro


paciente podría examinar su herida. Durante el


examen comprobé que estaba curado. Entonces le


pedía a uno de los doctores algunos elementos para


quitarle las suturas y curar su herida. Mientras le


realizaba las curaciones le pregunté si tenía una


cita con otro médico esa mañana ya que lo veía


tan apurado. El señor me dijo que no. Que necesi-


taba ir al geriátrico para desayunar con su esposa.



Le pregunté sobre la salud de ella. Él me respondió


que ella hacía tiempo que estaba allí ya que padecía


alzheimer. Le pregunté si ella se enfadaría si llegaba


tarde. me respondió que hacía tiempo que ella no


sabía quien era él, que hacía cinco años que ella no


podía ya reconocerlo. Me sorporendió y entonces le


pregunté. "¿Y usted sigue yendo cada mañana aun


cuando ella no sabe quien es usted?" El sonrió y me


acarió la mano."Ella no sabe quien soy, pero yo aún


sé quien es ella. Se me erizó la piel y tuve que conte-


ner las lágrimas mientras él se iba y pensé " Ese es el


tipo de Amor que quiero en mi vida". El amor verda-


dero no es físico, ni romántico. El amor verdadero


es la aceptación de todo lo que es, ha sido, será y no


será


No hay comentarios:

Publicar un comentario